29 de noviembre de 2008

Épocas


En una cena en honor de Albert Einstein, un estudiante le preguntó al gran científico: ¿Cuál es su profesión?

-Me dedico al estudio de la física, dijo Einstein.

El estudiante exclamó: ¿Quiere decir que usted sigue estudiando física? Yo terminé el año pasado.

Una de las grandes tentaciones en la vida es dividirla en épocas y pensar en cada una como un fin en sí misma. El estudiante piensa en el diploma del colegio secundario como una meta, pero no lo relaciona con lo que quiere hacer en la vida. El egresado tal vez consiga el trabajo de su elección y nunca considere que podría hacer otros trabajos en el futuro.

¿Cuántas veces has visto a un muchacho y una muchacha que se comprometen en matrimonio y gastan una fortuna, y cientos de horas preparando la boda con poca o ninguna preparación para los años de matrimonio que tienen por delante? O tal vez un matrimonio espera el nacimiento del hijo sin saber en realidad lo que significa la paternidad.

El huerto de la vida es un ciclo continuo de años y estaciones. Quienes cosechan mucho parecen ser las personas que miran hacia atrás y hacia adelante. Miran al pasado para rescatar de sus experiencias las que les servirán a resolver los desafíos del presente. Miran al futuro para decidir qué semillas plantarán hoy para lograr los éxitos del futuro.

Dios esta presente en cada segmento de nuestra vida, instándonos a aprender de las experiencias y los logros para que nuestros jardines alcancen el máximo de su potencial.

Oseas 10:12 (BLA) Sembrad para vosotros justicia, segad para vosotros en misericordia: romped el barbecho, porque es tiempo de buscar al Señor.

Melodía de Redención

Un colono europeo llegó con su familia a poblar el antiguo oeste norteamericano. Su esposa murió cuando la menor de sus dos hijas tenía apenas un año, así que la mayor lo ayudó a cuidar con sumo cariño a la hermanita. La pequeña era el orgullo de su padre. Era una criatura hermosísima, de cabello rubio y de ojos azules como el cielo.

Cerca del colono había una tribu indígena que tenía por cacique a un poderoso guerrero llamado Serpiente Rastrera. Éste odiaba a los blancos debido a que había sido objeto de su prejuicio racial. Una tarde, cuando el colono regresó a la casa de su trabajo en el campo, su hija mayor salió a su encuentro, deshecha en llanto. El cacique Serpiente Rastrera había llegado con algunos de sus hombres y había secuestrado a la pequeña rubia, que ya tenía cinco años de edad.

Pasaron catorce largos años en que el desconsolado padre buscó en vano a su hija, hasta que un día un viajero le contó que había visto a una muchacha rubia que formaba parte de una tribu indígena en una comarca cercana. El colono vendió su hacienda y, con el dinero de la venta, que representaba toda su fortuna, fue en busca de Serpiente Rastrera a fin de comprar a su hija. Cuando volvió a verla, su hija ya era una hermosa señorita rubia de diecinueve años como él se la imaginaba, pero que vestía, hablaba y se conducía como las otras mujeres de la tribu.

Serpiente Rastrera quería a la joven, pero también quería el dinero del rescate. Así que le propuso al colono que la muchacha fuera a vivir con él durante un mes, y que al cabo del mes ella decidiera con quién se quedaba. El padre accedió e hicieron el trato.

La pobre muchacha, convencida de que el hombre blanco que se hacía pasar por su padre la había secuestrado, se negó a comunicarse con él desde el principio del mes de prueba. El colono y su hija mayor hicieron todo lo posible por hacerle recordar su vida pasada, pero cuanto más se esforzaban, más inútiles parecían sus esfuerzos por ganar su confianza.

Cerca del fin del plazo acordado, mientras la hija mayor, sin pensarlo, cantaba una de las melodías con la que años atrás arrullaba a su hermanita, ésta reaccionó y comenzó a recordar su pasado. Corrió a los brazos de su hermana y de su padre, y lloró de felicidad al comprender lo sucedido. Este era su verdadero padre, que estaba dispuesto a pagar el precio de su rescate, por más alto que fuera.

Así como a la joven rubia de esta historia, a nosotros también nos ha secuestrado alguien llamado Serpiente. Se trata de «Serpiente Antigua», más conocido como Diablo y Satanás.1 Pero Dios nuestro Padre celestial, que nos ha estado buscando al igual que el colono, ya pagó el precio de nuestro rescate con la sangre de su Hijo Jesucristo. Ahora sólo nos queda decidir si hemos de vivir con Él o de volver a vivir con Serpiente Antigua. Más vale que reaccionemos ante esta bella melodía de redención, y corramos a los brazos de nuestro verdadero Padre, nuestro Padre celestial.

28 de noviembre de 2008

Mientras navegamos hacia las costas del cielo

Kirk Lynn, joven tenor de excelente calidad de voz, paseó la mirada por el auditorio. Habría, calculó, unas 470 personas. El cantante ejecutaba su música en una iglesia en Pittsburgh, Pennsylvania. Ese día cantó el himno cristiano: «Mientras navegamos hacia las costas del cielo».

Once días más tarde, Lynn canturreaba su canción mientras volaba, con otras 130 personas, de Chicago a Pittsburgh en el fatídico vuelo 427 de la compañía Air West. El avión se precipitó a tierra, y todos los que iban a bordo, 131 personas, perecieron.

No podemos saber el destino eterno de cada una de esas personas. Sólo Dios y la persona misma podían saber si su destino era la gloria eterna. ¿Qué podemos imaginar acerca de Kirk Lynn, el joven tenor que cantaba su himno?

Ya que sabemos que Jesucristo ofrece vida eterna al que tiene fe en Él y vive entregado a su señorío, podemos imaginar que Kirk llegó ese día a las costas del cielo y que su Señor y Dios lo recibió con los brazos abiertos.

Kirk había dedicado su vida a cantar para el Señor. El himno que había escogido dice: «Las tormentas surgen de repente en el embravecido mar; pero comprenderemos lo que es su gracia cuando lleguemos al celeste hogar.»

Viajar por el mar de la vida es vivir sometidos a tormentas. Así es esta vida. Cosas imprevistas suceden a cada paso. Tanto es así que la muerte puede estar aguardándonos a la vuelta de la esquina. Nadie tiene asegurada su existencia en este mundo.

Sin embargo, para el que cree en Jesucristo como Señor y Salvador, aun la contingencia más grave de esta vida, la muerte súbita, es un «llegar sanos y salvos a las puertas del cielo».

Si hay algo que confirma el valor de la fe en Cristo, es la absoluta seguridad de que al morir pasaremos instantáneamente a la presencia de Dios. Porque lo que distingue al creyente en Cristo del que todavía no le ha rendido su vida es la absoluta seguridad que el creyente tiene de que su muerte es el paso seguro a la gloria eterna.

Jesús dijo: «... el que oye mi palabra y cree al que me envió, tiene vida eterna y no será juzgado, sino que ha pasado de la muerte a la vida» (Juan 5:24). Esa es la seguridad del creyente en Cristo. Ninguna ideología, ninguna religión, ninguna filosofía, ninguna ciencia, da esta seguridad, sino sólo el Señor Jesucristo.

Por el Hermano Pablo. (Un Mensaje a la Conciencia)


El conejo del sombrero


Steve Martin sabía que quería ser animador. Trabajó mucho como mago y comenzó a atraer a la audiencia. Sin embargo, algunos de los trucos no funcionaron. Martin podría haberse descorazonado, pero escuchó y observó a su audiencia con cuidado. Notó que la multitud estallaba en risas cuando el truco fallaba.

En respuesta a la audiencia, Martin dijo:

-Revisé en mi actuación y comencé a sacar todas las cosas que habían funcionado bien.

Martin, en otras palabras, realizó su mejor truco de magia. Convirtió su acto ilusionista en una rutina de comedia y se convirtió en el presentador cómico número uno del país. Y continuó hasta ser un actor cómico famoso, luego director y escritor.

A menudo estamos tan concentrados en cumplir una serie de tareas que no nos tomamos el tiempo necesario como sopesar la efectividad - o necesidad - de lo que estamos haciendo. Si algo nos sale mal tomamos eso como una señal de que tenemos que abandonar todo por completo.

¿Qué quieren sus clientes y compañeros de trabajo en realidad?

¿Está luchando para darles lo que quieren, o está tratando tan solo de sacar un conejo inexistente del sombrero?

La experiencia no es lo que le sucede a una persona sino lo que una persona hace con ella.

Proverbios 1:5
Oirá el sabio, y aumentará el saber.


27 de noviembre de 2008

El Arte de estar bien


Si no queremos enfermar... expresemos nuestros sentimientos. Las emociones y sentimientos ocultos, reprimidos, terminan en enfermedades como la gastritis, úlcera, dolor lumbar y de la columna. Con el tiempo, la represión de los sentimientos degenera en cáncer. Entonces, vayamos a un confidente para compartir nuestra intimidad, nuestros secretos, ¡nuestros errores! ¡El diálogo, el hablar, la palabra, son remedios poderosos y una excelente terapia!

Si no queremos enfermar... tomemos decisiones. La persona indecisa se mantiene en duda, en ansiedad, en angustia. La indecisión acumula problemas, preocupaciones y agresiones. La historia de la humanidad se ha escrito por decisiones. Decidir es precisamente saber renunciar, saber perder ventajas y valores para ganar a otros. La gente indecisa son víctimas de malestares gástricos y nerviosos y de problemas cutáneos.

Si no queremos enfermar... encontremos soluciones. La gente negativa no encuentra soluciones y agrandan los problemas. Prefieren la lamentación, el chisme y el pesimismo. Es mejor encender un cerillo que lamentarnos de la oscuridad. Una abeja es pequeña, pero produce una de las cosas más dulces que existen. Somos lo que pensamos. El pensamiento negativo genera energía negativa que se transforma en enfermedad.

Si no queremos enfermar... no vivamos por apariencia. Quien oculta la realidad, pretende, posa y siempre quiere dar la impresión de estar bien. Quiere ser visto como perfecto, relajado, etc., pero está acumulando toneladas de peso. Una estatua de bronce con pies de barro. No hay nada peor para la salud que vivir de apariencias y fachadas. Estas son gente con mucho barniz y poca raíz. Su destino es la farmacia, el hospital y el dolor.

Si no queremos enfermar... aceptemos. El rechazo de la aceptación y la ausencia de la auto estima, nos hacen alienarnos a nosotros mismos. Estar en paz con nosotros mismos es el núcleo de una vida saludable. Los que no aceptan esto, se tornan envidiosos, celosos, imitadores, ultra competitivos y destructivos. Seamos aceptados, aceptemos que somos aceptados, aceptemos las críticas. Es sabiduría, sentido común y buena terapia.

Si no queremos enfermar... confiemos. Quien no confía, no se comunica, no está abierto, no se relaciona, no crea relaciones profundas y estables, no sabe cómo hacer amistades genuinas. Sin la confianza, no hay relaciones. La desconfianza es falta de fe en nosotros mismos y en la fe misma.

Si no queremos enfermar... no vivamos la vida tristes. El buen humor, la risa el reposo, la felicidad. Estas reponen la salud y traen larga vida. La persona feliz tiene el don de mejorar el ambiente dondequiera que viva. "El buen humor nos salva de manos del médico". La felicidad es salud y terapia.

Dr. Dráuzio Varella; enviado por Kartik Bodawala

El pensamiento de hoy trae buenas noticias para quienes buscan continuamente alguna receta que les ayude a prevenir enfermedades. Su autor precede cada párrafo con la frase "Si no queremos enfermar..." y eso debería animarnos a todos. No cabe duda que nuestro estado anímico influye en gran manera en nuestro organismo y su salud. De hecho, que el origen de una enfermedad sea psicosomática, no la hace menos "enfermedad". Así que, espero que sepamos tomar y valorar los sabios consejos del pensamiento de hoy... para nuestro bienestar tanto nuestro como el de quienes nos rodean.

Que tengas un buen día!

¿Agradecido de que?


En el espíritu de Acción de Gracias, una fiesta que se celebra en Estados Unidos, y que no tiene mucha fuerza en América Latina, mas sin embargo la biblia nos anima en Efesios 5:20 “Dando siempre gracias por todo al Dios y Padre, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo”, quiero compartir esta palabra poderosa: GRACIAS.

La palabra GRACIAS tiene el poder de transformar nuestra salud, felicidad, y el éxito. Es una palabra que la conocemos pero muy poco la tenemos incorporada en nuestra vida.

Muchas personas van por la vida con el sentimiento de ingratitud y se preguntan ¿agradecido de que? ¿De no tener dinero? ¿De no tener esposo u esposa? ¿De no tener trabajo? ¿De no tener salud? ¿Qué no me ascendieron en el trabajo? ¿Qué no se dio el negocio? Y pare usted de contar las quejas, los reclamos a las injusticias de la vida. ¿Por qué a mí? Este tipo de personas viven reaccionando a todo y son esclavos de la ingratitud, son presas de sus labios.

¿Cuántas veces agradecemos lo que somos y lo que hemos vivido? ¿Cuántas veces solo nos enfocamos en lo que no tengo? ¿Has valorado cada momento de la vida? ¿Has valorado a las personas que tienes a tu lado? ¿Has pensado cuánto más amplia se ve la vida desde el lente de la Gratitud?

Una investigación demostró que la gente agradecida es más feliz y tiene más probabilidades de mantener relaciones fuertes y sanas. Una persona agradecida según el Instituto de HeartMath, hace que su corazón funcione rítmicamente mejor, ayuda a reducir la tensión y a sanarse físicamente. El ser agradecido trae beneficios al cuerpo físicamente y emocionalmente.

Cuando usted está agradecido usted llena su cuerpo y cerebro con emociones y endorfinas que le elevan y estimulan favorablemente más que las hormonas que producen tensión y agotamiento.

La gratitud y el aprecio son esenciales para un ambiente familiar sano, e inclusive para el trabajo. Las parejas se divorcian por la ingratitud, la infidelidad, el desprecio, la gente deja sus empleos porque ellos no se sienten apreciados, valorados, la mayoría de los problemas ocurren por la ingratitud y eso viene desde los tiempos de Adán.

Muchos desconocen el poder del agradecimiento, la palabra GRACIAS puede hacer la diferencia en la vida de uno o muchos. Necesitamos ser agradecidos por la vida, ese regalo maravilloso de Dios, nuestra tarea es aprender a vivir esa vida abundante que El diseño para cada uno. Cada día nos ofrece un motivo para estar agradecido. Piensa por un momento en todas las cosas que Dios te ha dado, puedes ver todo lo que él hizo en la cruz para que tu y yo tengamos vida. Puedes ser agradecido porque ahora estas leyendo, mientras que hay muchos que no ven, ni pueden leer. Puedes ser agradecido porque ahora tienes acceso a internet mientras que hay otros que no pueden ni tienen acceso a una computadora. ¿Puedes ser agradecido?

La gratitud es una respuesta llena de amor, pero a su vez es un músculo que mientras mas lo ejercitemos mas fuerte se pondrá. Te enseñaré algunos tips para que practiques:

1. Cada día tome los primeros 10 minutos al despertarse y agradezca a Dios por todas y cada una de las bendiciones que él tiene para usted. Haga su lista y de gracias a Dios por las cosas que quiera ver en su vida. Un día de gratitud será un día de bendición.

2. Establezca un tiempo de Acción de Gracias en su familia. El mejor momento para hacerlo es durante una de las comidas donde todos puedan estar reunidos. Conversen de las cosas por las cuales estén agradecidos. Somos seres conversacionales, nuestras conversaciones generan acciones, si hablamos con acciones de gracias cosecharemos grandes cosas.

3. Exprese su gratitud a alguien en particular. Escriba un e-mail, una carta, haga una llamada o realice una visita para expresar gratitud a alguien de quién este agradecido. Esto ayudará a evitar o salir de la depresión.

4. Agradezca a sus compañeros de trabajo, a sus empleados, a todas las personas, valórelas y aprécielas, que toda persona sepa lo agradecido que es usted. Ellos se van a recordar como lo hiciste sentir.

Ser agradecido no es difícil, ni cuesta mucho, es asunto de actitud. Comprométete a partir de hoy a ser una persona agradecida. Hay mucho para agradecer, y yo culmino siendo agradecido.

Gracias Dios por la salvación que me diste en Jesús tu hijo amado, también por todo lo que me das en abundancia: salud, felicidad, prosperidad. Gracias por las duras lecciones que me han ayudado a conocerme mejor y mejor conocer a los otros.

Gracias por los fracasos vividos, eso me enseñó la humildad, la obligación de jamás sentarme sobre mis laureles y la necesidad de comprender el fracaso de los demás y ofrecerles la ayuda que necesitan en eso momentos.

Gracias por todas esas ocasiones que se me presentaron para cultivar la paciencia, la tolerancia, y la esperanza.

Gracias por las oportunidades que aproveché, las desgracias que evité, las soluciones que encontré, los talentos que desarrollé, las victorias que he obtenido, los días maravillosos que he vivido.

Gracias por mi esposa, mis hijos, esa hermosa familia que tu me has dado, por mis padres, los amigos que encontré, los maestros que me enseñaron, los libros que he leído, los viajes que he realizado, las comidas que me han deleitado, los juegos que he jugado, los deportes que he practicado,

Gracias por los paisajes que he admirado, el sol que me ha calentado, la luna que me ha alumbrado, el aire que he respirado.

Gracias Dios por ser mi amigo y cuidarme a pesar de mis errores, por protegerme a pesar de mis debilidades, amarme a pesar de mis defectos, y darme soluciones a pesar de mis terquedades..

Gracias por la alegría de vivir, y vivir la vida al máximo.

25 de noviembre de 2008

Vision 20/20


Los biólogos marinos, en estos días están adquiriendo abundantes conocimientos sobre los suelos del océano y todo esto, gracias al submarino que ha sido diseñado en especial, para transportar una sola persona. Con la habilidad de permanecer sumergidos hasta un máximo de ocho horas continuas y capaz de bajar casi un kilómetro de profundidad, estos submarinos le dan un nuevo significado al término, Panorama oceánico, gracias a una caja de un pasajero transparente hecha de acrílico. Los submarinos están equipados con luces, impulsores eléctricos, brazos hidráulicos, así como instrumentos científicos de navegación y equipo de supervivencia.

Sin embargo, pese a todos los aparatos de alta tecnología, el siguiente hecho no cambia: ¡Es bastante oscuro allá abajo!

La luz del sol, tan solo penetra hasta un límite. Después de cierto punto en el descenso, es necesario utilizar otra fuente de luz, si deseas observar las maravillas de las profundidades.

Lo mismo es aplicable a las criaturas de las profundidades del mar, muchas de las cuales emiten cierta forma de iluminación natural conocida como bioluminiscencia. Para algunos, la luz inherente a ellos, es usada como un mecanismo de defensa. Los enemigos son rociados con un tejido luminoso que convierte al cazador en presa.

Para otros, la luz provee camuflaje. La poca luz del sol que desde arriba logre penetrar la oscuridad, obra en combinación con la procedente de la parte inferior de las criaturas y borra cualquier sombra que pueda delatar su posición.

Pocos de nosotros, descenderíamos al nivel de estas criaturas, pero sí, entendemos, cómo han de sentirse en cuanto a la luz. Cuando manejamos tarde en la noche, por una carretera poco iluminada, dependemos de las luces delanteras del auto para evitar salirnos del pavimento. Protegemos nuestras casas de intrusos, al iluminar el patio con focos.

Para vivir en este mundo oscuro y confuso, el Señor ha colocado en nosotros Su propia luz, el Espíritu Santo. Él nos revela lo que es verdadero y bueno, así como dónde ir y qué sitios evitar. Él es nuestra conciencia y guía.

Al hacer una evaluación del día vivido. ¿Puedes señalar las veces que el Espíritu Santo te dirigía o indicaba lo que estaba bien o lo incorrecto?

Mateo 5:16 Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.

24 de noviembre de 2008

¡No me acuerdo!


Una vez un ministro muy querido llevó un secreto, enterrado por mucho tiempo en lo profundo de su corazón, el peso de un pecado.

Él había cometido es pecado hacía muchos años durante su entrenamiento en el Seminario. Nadie sabía lo que había hecho, pero él sabía que estaba arrepentido. Aun así, había sufrido remordimientos por años, sin idea del perdón de Dios.

Una mujer en su iglesia amaba al Señor profundamente y afirmaba que tenía visiones en las que Jesús le hablaba. El ministro, escéptico de sus afirmaciones, le pidió: "La próxima vez que hable con el Señor, podría preguntarle cuál fue el pecado que su ministró cometió mientras estaba en el Seminario". La mujer asintió.

Cuándo volvió a la iglesia unos días después el ministro le preguntó: "¿Le visitó?" Ella contestó: "Sí".

- "¿Y le preguntó qué pecado cometí en el Seminario?"

- "Sí", respondió.

- "Bien, ¿qué le dijo?"

- Dijo, "no me acuerdo".

Toda persona debe tener un lote especial en el cementerio donde enterrar las faltas de los amigos y familiares.

Efesios 4:32 Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándonos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.

22 de noviembre de 2008

Dar sin esperar.

Este norteamericano recibió un título de medicina del Colegio de Medicina de la Universidad de Nueva York. Recibió una asignación para el Laboratorio de Investigación de Virus, en la Universidad de Pittsburgh. Le fue indicado por parte del ejército desarrollar una vacuna contra la influenza y entre los muchos honores que recibió se encuentra la Medalla Presidencial de la Libertad.

Sin embargo, Jonas Salk no es conocido por lo que recibió, sino por lo que ofreció. Él y su grupo de investigadores dieron su esfuerzo para preparar un virus que inactiva la polio y que puede servir como un agente inmunizador contra ella. Para 1952, ellos habían creado una vacuna y en 1955, fue difundida para ser usada en los Estados Unidos, prácticamente así terminando con las consecuencias catastróficas de la polio.

Recibirás muchas oportunidades en tu vida, y lo más probable, un número de certificados, diplomas, y premios. Pero lo que al final contará es lo que haces con el entrenamiento que has recibido y las habilidades y características que has desarrollado.

Encuentra la forma de dar, crear o generar algo hoy que pueda ser de beneficio a otros. En tus acciones no solo habrá un potencial para la fama y la recompensa, sino también una gran satisfacción personal, la recompensa de los más altos valores.

Ninguna persona jamás fue honrada por lo que recibió. El honor fue la recompensa de lo que dio.

Proverbios 21:26
El justo da y nada recibe.

Que tengas un buen día!

21 de noviembre de 2008

Visitas con alas

Cada día, cuando estoy en mi cocina, recibo la delicada, preciosa y esperada visita de una parejita que he aprendido a apreciar. Aunque libres como el viento, todos los días -y a veces, varias veces el mismo día- se acuerdan de hacer una paradita para saludarme y acompañarme. Por ello le estoy agradecida a su Dueño, Quien se los permite. Lo cierto es que tengo ya casi 3 años de experimentar estos encuentros. Además de otros muchos visitantes que pululan por el área, esta parejita es la que siempre llega y se posa de forma tranquila y agradable sobre el techado de mi garaje, regalándome todo un espectáculo.

Su acicalamiento, el uno a la otra, me enseña tanto sobre su ternura y delicadeza... ¡me encanta ver cómo se tratan!

Invariablemente, me hace sentir alegre el verlas aterrizar cada día. Es evidente que ellas desconocen que hay momentos en que me encuentro muy ajetreada y acalorada, o que algunas veces me siento decaída o simplemente estoy terriblemente cansada. O quizás exhibo de momento un temperamento poco cordial. Pero así sin previo aviso me llega de repente la visita. Se ponen tan cerquita de mí, al alcance de mi mano, sin ningún temor. Y es que parecieran darse cuenta de que están seguras al otro lado de la malla de la ventana, y que yo soy la encerrada. Me causan tanta gracia y hacen que cambie mi estado anímico en el que me encuentre. Muchas veces hasta me hacen hablarles como si fueran otro ser humano, como si pudieran entenderme. Es más, a veces me pregunto si me comprenden porque al emitirles algunos sonidos se ponen más cerquita a mi ventana, llevándome a saludarlas y hasta cantarles.

Yo creo que este es un encuentro divino y maravilloso, en verdad muy relajante y grato para mí y mi familia.

En medio de todas estas visitas, he podido comprender la profundidad de la Palabra de Dios cuando nos anima a no preocuparnos por "qué comeremos o qué vestiremos, que nos fijemos en las aves de los cielos que no siembran ni cosechan ni almacenan, sin embargo el Padre Celestial las alimenta. ¿No valen ustedes mucho mas que ellas?" (Mateo 6:26 NVI).

La gracia del espectáculo que nos regalan nos hace ser instrumentos del Señor y recompensarlas con alpiste todas las veces que llegan. No me cabe la menor duda de que así mismo nuestro Salvador se encarga de suplirnos tan sólo porque se deleita en nuestro amor por Él.

¡Gracias a las cosas mínimas que nos enseñan tanto en la vida!

20 de noviembre de 2008

Estorbos

En la novela de Julio Verne La isla misteriosa, se habla sobre cinco hombres que se escapan de un campo de prisioneros de una Guerra Civil mediante el robo de un globo. AL elevarse en el aire se dan cuenta que el viento los lleva hacia el océano. Mientras observan cómo la tierra firme desaparece en el horizonte, se preguntan cuánto tiempo logrará permanecer el globo en el aire.

A medida que pasan las horas y el globo se aproxima a la superficie del océano, los hombres deciden que deben arrojar algo pesado a bordo porque no tienen forma de calentar el aire del globo. A regañadientes, arrojan zapatos, abrigos y armas, y los preocupados viajeros sienten que su globo se eleva.

Sin embargo, al poco tiempo descubren que el globo se acerca una vez más de forma peligrosa a la superficie de las olas, así que lanzan al mar los alimentos. Para desdicha, esto también fue solo una solución temporal y la nave amenaza de nuevo bajar los hombres al mar. Uno de ellos tiene una idea: pueden atar las cuerdas que sostienen la barquilla y sentarse en ellas. Luego sueltan la barquilla que queda debajo de ellos. Al hacerlo, notan cómo el globo se eleva otra vez.

A los pocos minutos, divisan tierra. Los cinco saltan al agua y nadan hasta la isla. Estaban vivos debido a que fueron capaces de discernir la diferencia entre lo que era necesario de verdad y lo que no lo era. Las necesidades que antes pensaban que no podrían vivir son ellas eran las mismas cargas que casi les cuestan la vida.

¿Por qué no hacer una evaluación sincera de las cosas que quizá te frenen hoy?
¿Son necesidades físicas o espirituales tuyas o de alguien que amas?
¿Cómo sería tu vida sin ellas?
Si las eliminas, ¿dispondrías de más tiempo para las cosas en tu vida que importan de verdad?

Pídele a Dios que te muestre cómo podrías mejorar tu vida si haces algunos cambios y si eliminas algunas cosas que te agobian.

No es suficiente estar ocupado...
La preguntas es ¿en qué estamos ocupados?

Hebreos 12:1
Despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia.